De los clásicos objetivos de seguridad y confort que se le puede pedir a un buen neumático (acompañados de un precio razonable), ahora, su papel en la nueva era de la movilidad sostenible, autónoma y conectada, se complementarán con otras innovaciones vinculadas al: diseño, los materiales, su ecoeficiencia y una relación directa con la gestión electrónica e inteligente del sistema y la carrocería.

Actualmente, desde un punto de vista normativo, el neumático se identifica a través de una geometría y unas referencias que lo definen técnicamente mediante la inscripción situada en su flanco: dimensión, índice de carga, código develocidad, modelo, usos… Puedes realizar un ejercicio de comparación de referencias (y precios) en neumáticos.es

También desde 2012, se le exige un etiquetado europeo que nos permita valorar características relacionadas con el consumo eficiente de carburante, su nivel adherencia en superficie mojada, y una indicación numérica del nivel de ruido o de emisión acústica del neumático expresado en decibelios.

neumaticos

Encontrar el compromiso “ECO” de una mejor eficiencia en el consumo de carburante o en la seguridad de la frenada, supone conseguir un compromiso entre un bajo coeficiente de rodadura (CRR) y un alto índice de adherencia (IA). Una relación inversa que obliga a los fabricantes a investigar y desarrollar para conseguir nuevos compuestos con mejores prestaciones.

Para la mejora de estos aspectos relacionados con la seguridad, el confort y la eco-eficiencia, se está trabajando por parte de los fabricantes en la innovación y desarrollo de nuevos productos con una mayor ambición y exigencia técnica y medioambiental, así como para su integración en futuros sistemas autónomos.

Fuente:http://www.hibridosyelectricos.com/articulo/actualidad/neumatico-era-movilidad-sostenible-autonoma-y-conectada/20160802195201012645.html